ORIENTACION


¿QUÉ ES ORIENTACIÓN?

ponencia presentada en el
VII CONGRESO NACIONAL INTERDISCIPLINARIO EN ORIENTACION
MERIDA 2010
(Del 06 al 10 de julio de 2010)
Financiada por el Consejo de Investigaciones y Postgrado.
Universidad Nacional Abierta.

DORIS CAMPOS ARMAS
Licda (MSc) Educación-orientación.
(Dra)Ciencias de la Educación
Campos1810@hotmail.com

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA
Av. Los calvani Nro 18. San Bernardino. Caracas


Hacer reflexión sobre la definición de orientación radica en la necesidad de aclarar confusiones de actitud y de hecho en las personas que pretenden dedicarse a la tarea de orientar e inclusive en quienes ya lo hacen, asumiendo posturas que en algún momento desvirtúan la función orientadora y se insertan en otros campos sin delimitar bien su objetivo. Esta demanda de aclaratorias permea la expectativa de las y los usuarios de los servicios de orientación quienes solicitan ayuda en casos en los que no es posible que las y los orientadores logren responder idóneamente puesto que no pertenecen a la formación ni a la práctica orientadora.

En cuanto a la investigación realizada para sustentar esta reflexión; el origen de la inquietud está resumido en dos preguntas: 1) ¿Qué es orientación? 2) ¿Por qué quiso estudiar orientación? Estas preguntas son planteadas frecuentemente en las diferentes cohortes de estudiantes de maestría en educación, mención orientación. Ante estas interrogantes las y los estudiantes, en su mayoría, han dado respuestas que en ningún momento reflejan la tendencia hacia lo educativo y preventivo. Al referirse al concepto de orientación presentan dificultad para definirla delimitando su campo de acción sin confundirla con áreas afines como la psicología, trabajo social, entre otros. Esto conlleva a que al responder a al segundo planteamiento reflejan su expectativa a: ocuparse de la consulta y tratamiento de casos característicos de la psicología, encontrar respuestas a problemas personales para lograr su propia sanación. Evidentemente existen confusiones en cuanto a la función orientadoras, las cuales es importante aclarar.

En este sentido, es inminente la necesidad de hacer un análisis global de esta inquietud para reconstruir un concepto de orientación en el contexto de la transdisciplinariedad y adaptado al momento histórico actual. Como punto de partida para esta tarea se tiene una serie de ideas, planteamientos y conceptos que determinan la validez del producto de esta reflexión.


Cuando el existencialismo afirma que los estados de ánimo determinan la magnitud de apertura al mundo de un individuo, permitiendo el aprovechamiento de lo que la experiencia le ofrece, sustenta el principio educativo que señala: la persona aprende mejor cuando se siente segura emocionalmente. Este principio dio origen al concepto inicial de orientación como el proceso de ayuda, encargado de mantener el equilibrio emocional del sujeto que aprende. De ahí que la orientación es la parte personalizada de la educación y puede realizarse a través de los programas educativos, está fundamentada en la filosofía educacional que predomina en la escuela y la comunidad y posee su propia filosofía, centrada en la existencia del ser, la cual demanda una meditación cuidadosa que se traduce en la manera de entender la situación del ser frente a los problemas del mundo. Campos y Campos (2006) b.

Podría decirse que en el en el ámbito educativo la orientación se encarga de armonizar el desarrollo académico con el desarrollo personal a fin de lograr el bienestar integral del ser. Lo que en los documentos de la UNESCO (1982), se denomina humanización de la educación. En este contexto se perfila el objeto de estudio de la orientación, el cual podría resumirse como: el bienestar integral del ser. La población a la cual está dirigido su quehacer está constituida por individuos sanos (UNESCO, 1982); pero también realiza acciones para ayudar a los que, en algún momento, pueden estar en situación de desventaja o marginación. El objeto de estudio de la psicología es la conducta y más específicamente, la psicología de la educación estudia los procesos de cambio que se dan en el individuo como consecuencia de su participación en actividades educativas (Coll, 2001); la orientación, tomando como referencia esos cambios, estudia la forma de ayudar al mismo individuo a descubrir los recursos y potencialidades que posee para lograr esos cambios, mantenerlos y usarlos en pro de su bienestar integral.

El medio donde se desarrolla el proceso orientador no es solamente el educativo, pues también es útil en los espacios lo comunitario y socioproductivo, tal como se expresa en el proyecto de Sistema Nacional de Orientación, 2009; pero su método sigue siendo educativo y la orientación pertenece a las ciencias pedagógica englobadas en las, hoy llamadas ciencias de la educación; de allí que las características de la formación académica de las y los profesionales de la orientación les capacita para educar en el desarrollo humano durante el continuo del ciclo vital haciendo énfasis en la prevención de los problemas que pudieran entorpecer el desarrollo integral del ser. La orientación es parte integrante del proceso educativo para el desarrollo humano en cualquier nivel, ámbito o medio, y en nada se aleja de él; por el contrario, en los planteamientos alternativos que tratan de introducir una concepción distinta de orientación, subyacen los principios educativos a los que se adscribe su origen.


La orientación como proceso sistemático continuo y organizado, contribuye a la formación del individuo, respondiendo a la demanda de asesoraría personal para el autoconocimiento y la toma de decisiones, necesarias para la configuración de un ser independiente, con capacidad para expandir todos los aspectos de su personalidad y experimentar el desarrollo intelectual, afectivo y social, que genera beneficios en lo personal, vocacional y profesional de forma tal que todo ser humano puede identificar lo que le es adecuado para sentirse feliz, examinando sus intereses, valores, motivaciones, competencias, fortalezas y características personales.

Existen diferentes conceptos de orientación que conllevan a verificar la existencia de elementos comunes, que se han mantenido a través del tiempo. Para continuar la reflexión es importante revisar algunos de ellos:

Arthur: (1979). La concibe como la asistencia prestada al individuo para que hagan escogencia y ajustes inteligentes a su propia manera de vivir.

Tyler: (1979). Señala que es un proceso para facilitar elecciones inteligentes de los cuales depende el futuro desarrollo de la persona.

Essenfel (1979) destaca que, la orientación es un proceso motivador de cambios o estimulador de mejores condiciones dentro de la escuela y de la sociedad, para procurar el desarrollo humano en general.

Casado: (1987). Asevera que es un proceso que contribuye al desarrollo del individuo mediante el asesoramiento en la toma de decisiones. Plantea una concepción ecológica que la reconoce como hecho que consiste en preparar condiciones educativas, laborales y humanas para que la persona desarrolle su potencial humano.

García: (2003). Asegura que orientar es trabajar con los procesos inherentes al desarrollo del potencial de las personas con miras a fortalecer y hacer mas afectiva la evolución de tales procesos.

Maldonado: (2007). Resume su concepto como ayudar a otro a realizarse como persona.

Igualmente, algunas comisiones, organizaciones e instituciones autorizadas se han ocupado de elaborar sus conceptos de orientación.

En los documentos de la UNESCO (1998) se hace referencia a la orientación como un proceso para poner al individuo en capacidad de tomar conciencia de sus características personales y aprovecharlas en vista a la elección de sus estudios, actividades profesionales, y todas las coyunturas de la existencia en el de ser simultaneo de servir al desarrollo de la sociedad y a la expansión de su personalidad

En documentos del Servicio de Orientación. Escuela de Psicología. Universidad Central de Venezuela, la definen como: una relación profesional sistemática que busca ayudar al individuo alcanzar una mayor relación positiva con su entorno, comprensión de sus propias características y potencialidades a escoger y hacer ajustes inteligentes y al relacionarse

La mesa técnica para el diseño del sistema nacional de orientación, creada por el Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria, en el Proyecto: Sistema Nacional de Orientación (PSON) (2009) señala que orientación es una praxis social dirigida a la facilitación de los procesos de desarrollo humano en las dimensiones del ser, convivir, servir, conocer y hacer.

Como puede observarse el elemento común en estos conceptos es el asociado a ayudar a descubrir potencialidades para el desarrollo de la persona, donde se resalta la importancia de la necesidad de relación con los demás, identificadas indistintamente como: espacio vital, mundo, entorno, sociedad y en procura del bienestar integral. Ahora bien, analizar el significado de la orientación para asumir un concepto que guíe la praxis profesional significa ubicar su origen a fin de no perder, ni cambiar el rumbo del objetivo inicial, sin antes deliberar sobre el asunto; por lo tanto es necesario ir a los principios que sustentan la idea del valor del acompañamiento que implica orientar a un ser para que alcance su desarrollo integral y buscar lo puntos donde convergen.

La orientación, al aceptar el principio de automejoramiento, cree que las percepciones del individuo son importantes y que el papel del/a orientador/a consiste en trabajar con el individuo en la revisión y evaluación de dichas percepciones, en otras palabras, ayudarle a desarrollar progresivamente un concepto de sí mismo. Combs (s/f) afirma que todas las formas de percepción son aprendidas, por lo tanto también pueden ser enseñadas, siempre y cuando se encuentre la manera de proporcionar las experiencias necesarias; es decir el papel del/a orientador/a como mediador/a es importante en la revisión y evaluación de las percepciones del individuo..

Sin la creencia básica de que todo individuo tiene la habilidad de aprender, la razón de ser de la orientación desaparece. Cuando un individuo hace una elección procura hacer lo mejor para si mismo, dependiendo de su situación y de él mismo. Habiendo decidido, asume un auto dirección que aumenta su motivación intrínseca. Una persona mentalmente saludable, basa su elección tanto en el bienestar ajeno (bienestar social) como en el propio. Aquí la función de la orientación es ayudar al individuo a conocerse a sí mismo, a conocer su ambiente potencial y a integrar ambos factores, en la medida que la persona toma decisiones con miras al futuro.

Ahora bien, el concepto de educabilidad reconoce en el individuo su disposición, ductilidad o plasticidad para recibir influencias y para elaborar sobre ellas, nuevas estructuras espirituales. Dicho concepto constituye el supuesto de la educación y la pedagogía y su negación haría inútil, toda ciencia de la educación. Por lo tanto, la orientación, como disciplina correspondiente a las ciencias de la educación, asume el concepto de educabilidad y construye un concepto de orientabilidad con el cual designa la capacidad que un individuo tiene para cambiar algo de sí mismo a instancias de una intervención orientadora. La orientación apoya a la educación para conseguir en la persona un desarrollo integral, procurándole la adquisición progresiva de nuevas conductas, hecho dependiente de la plasticidad característica de los procesos biológicos y psicológicos del hombre.

Basado en los conceptos de educabilidad y orientabilidad, surge otro que se refiere al especialista que atiende el proceso de orientación, dicho concepto es la orientatividad, la cual responde a la interrogante ¿es posible que una persona pueda orientar a otra? Su respuesta positiva implica que quien trate de orientar tenga aptitudes para ello. La orientatividad se refiere a las aptitudes que tiene una persona para orientar a otra, así como a la capacidad de usar adecuadamente los medios que, a tal efecto, se dispongan La capacidad para orientar proviene, no sólo de las disposiciones naturales, sino también de una formación académica adecuada que le haga competente para ello y a una motivación intrínseca por el desarrollo humano de las demás personas.

De allí que, el objetivo de la orientación es potenciar el desarrollo humano en todos los aspectos, procurando fomentar el desarrollo integral de la persona. Como disciplina productiva, centrada en las personas y sus realidades, se sustentan en una serie de principios humanistas, tales como:

La creencia que el desarrollo humano de las personas por naturaleza tiene hacia el crecimiento autónomo, y sustentable.

La creencia que la forma de ser de la persona y estilo de relación de la sociedad ocurre por la interacción de la persona con su ambiente y el tiempo.

La creencia que el proceso orientador es para asistir a individuo en su desarrollo autónomo y clasificar sus necesidades, aspiraciones y facilidades, así como identificar, el desarrollo y hacer uso de sus recursos personales y ambientales para que le ayude a decidir sus metas

La creencia que el foco de la acción educadora de la orientación debe ser la prevención, como vía para anticiparse y hacer frente a los retos, obstáculos y dificultades que se presenten.

La creencia que el foco de la orientación debería ser sobre la promoción activa de estilo de vida saludable de las personas y una actitud responsables ante sí mismo y ante la sociedad

La creencia que el foco de la orientación debería centrarse en el fortalecimiento de la persona.


Con base en lo señalado puede decirse que el ser humano es perfectible y susceptible a la orientación por su permeabilidad a la influencia de nuevas experiencias que en interacción con factores personales promueven cambios positivos. El modo en que afecta una experiencia nueva depende, no sólo, de las características de la experiencia en sí misma, sino de las potencialidades de la persona que la vive y de sus experiencias previas; por lo tanto puede ser actuado por sí mismo o ayudado por otras personas. Es aquí donde entra en juego la legitimidad de la orientación; la función orientadora consiste en crear un ambiente que promueva el desarrollo humano, propiciando así, que la persona tenga la oportunidad de aprender de las experiencias de los otros y de las propias, estableciendo vínculos con la realidad, participando activamente y evaluando su propio desempeño.

En cuanto a lo que ha sido la orientación en Venezuela, la praxis profesional en esta área, tanto en tareas asistenciales como preventivas y de docencia, hasta hace pocos años estuvo basada en modelos desarrollados en otros países, pretendiendo reproducir una manera de ser ajena a la realidad de las y los venezolanos. Calonge (1988) Esta práctica fue valiosa para la formación académica de las y los orientadores y constituye el punto de partida para desarrollar lo que hoy es la orientación en el país: una disciplina que se ha ganado lugar especial en el quehacer educativo y el desarrollo comunitario y ha conquistado otras áreas del hacer. Campos (2006)

Diversos factores históricos-sociales sirven de contexto al inicio de los servicios de orientación en el país, en las década de los años 30 y 40. Entre ellos, el desarrollo de la industria petrolera, el crecimiento de la población, el éxodo del campo a la ciudad, la expansión del sistema educativo, la creación de las escuelas normales, las escuelas técnicas y la inmigración al país de profesionales calificados en el área de la Orientación. PSON, (2009) Desde este contexto, emerge la necesidad de los servicios de orientación con una visión de atención a los estudiantes en asuntos relacionados con la vocación, la selección de personal y la inserción laboral. Posteriormente, con el crecimiento de la matrícula escolar de estudiantes provenientes del campo a la ciudad; surge la necesidad de adaptación al ambiente escolar y las necesidades académicas para el logro de las metas de aprendizajes. PSNAO (2009)

Con el devenir de la dinámica social venezolana se han diversificado las necesidades de atención a la población, a través del proceso de orientación; este hecho ha ido ampliando el radio de acción de esta práctica que tuvo su origen en el ámbito educativo y especialmente en el trabajo vocacional; pero la esencia del proceso orientador continúa intacta; sigue asumiéndose como una relación de ayuda, sustentada en las premisas de ayudar a ser, ayudar a conocer y ayudar a vivir, las cuales están vigentes, pues la Comisión Internacional sobre la Educación para el siglo XXI, creada por la UNESCO, ha estimado que para resolver los problemas del futuro, la educación debe apoyarse en cuatro pilares “aprender a conocer”, “aprender a hacer”, “aprender a vivir con los demás” y “aprender a ser” (UNESCO, 1998) Esta idea conlleva a la concepción de un servicio de orientación empeñado en contactar la realidad de los actores comprometidos en el proceso de orientación y centrado, como siempre, en las y los usuarios.

En este momento, con la ampliación del ámbito de acción de la orientación a la comunidad y el medio socioproductivo y el empoderamiento de los actores sociales a través en la participación, se aprecia la persistencia de la necesidad de un orientador/a y un proceso de orientación para el desarrollo de la vida en relación con los demás y al servicio de los demás para avanzar en el desarrollo social; pero hablar del desarrollo social es hablar del desarrollo humano porque el epicentro del desarrollo de la sociedad, está en el desarrollo individual de cada uno de sus miembros y esa tarea, en la educación de los grupos, cualquiera sea su contexto, esa tarea le corresponde a la orientación; la orientación es el elemento vinculante entre el individuo y la sociedad, Calonge, (1988) y no puede operar sin estar en permanente contacto con el ser humano y la sociedad concreta donde se desarrolla. De lo planteado se deduce la actualidad de la práctica orientadora: hacer un trabajo sustentado en modelos producidos en el seno de la comunidad donde opera, partiendo de su estructura para generar proyectos colectivos que lleven a aumentar el nivel de participación y compromiso socia para y con el desarrollo.

En el paradigma del desarrollo humano está contemplado que el desarrollo de la persona y el desarrollo de la comunidad pertenecen a un mismo y único proceso. UNESCO( 1998); por lo tanto, es necesario que las y los orientadores se inserten en la comunidad escolar, laboral, vecinal, en las organizaciones; conozcan sus características, compartan sus sueños y, de manera técnica, pongan en práctica los conocimientos que la academia, la investigación y la experiencia le proporcionan para estimular el desarrollo necesario para el bienestar integral de las personas. Además del conocimiento adquirido en su formación académica; para mediar adecuadamente un proceso de orientación las y los profesionales requieren suficiente información sobre los factores de riesgo y los factores protectores que influyen en el avance que pueda lograr la persona y una actitud empática unidad a su capacidad para distinguir entre el acto y la potencia. En las ideas Rogerianas se reconoce la empatía como el medio esencial para conocer las significaciones del mundo fenoménico del sujeto. El compartir objetivos y experiencias comunes puede coadyuvar bastante en la tarea, que depende en alto grado de la habilidad del terapeuta, en este caso: el/a orientador/a.

La capacidad para distinguir entre el acto y la potencia está relacionada con la necesidad de asumir que la persona es capaz de superar sus debilidades si recibe la orientación adecuada, con los métodos o técnicas adecuadas, por lo tanto demanda una aplicación correcta del conocimiento. Para ilustrar la afirmación antes señalada, se puede hacer uso de una comparación, aclarando que la misma sólo es válida si se toma con la mejor intención, ya que la matemática limita la flexibilidad que caracteriza los procedimientos en la resolución de los problemas de orden social. La comparación consiste en imaginar que una persona está ante la necesidad de desarrollar una operación matemática para encontrar el resultado de elevar el numero 2 a la potencia 3; si esta persona desarrolla el procedimiento correcto diría que consiste en multiplicar 2 por 2 por 2 y el resultado final sería 8, eso es correcto; pero si la misma persona cree que el procedimiento consiste en multiplicar 2 por 3 obtendría como resultado 6 que no es correcto. Es decir se usó un procedimiento y se realizó un esfuerzo pero no se obtuvo el resultado deseado. Esto quiere decir que no basta ejecutar la acción, esforzarse y tener la mejor voluntad; es necesario conjugar todos los elementos que implican un procedimiento correcto al momento de orientar y evitar las confusiones, que pueden tener su raíz en los errores de concepto.

En el mismo orden aparece la necesidad de reafirmar la principal característica del quehacer orientador: su carácter preventivo, la prevención es acción para la vida y en mayor cuantía la prevención primaria, entendida como la forma de disponer, con anticipación, los elementos necesarios para lograr el desarrollo de la persona, pues el trabajo asistencial se reduce a su mínima expresión si se ejecuta con fuerza la prevención. En el devenir del trabajo orientador, la prevención ha sido la vía determinante del éxito ante los riesgos que entorpecen el desarrollo de las personas; pero en muchas ocasiones es poco evidente, porque al partir de “lo sano” es sensible a ser juzgada como innecesaria; más, ante los hechos ocurridos por falta de prevención, es innegable su valor. He aquí la orientación como un acto de prevención primaria a partir de la acción educadora basada en aspectos como: autoconocimiento, autoestima, motivación, los cuales perdurarán en el tiempo, mientras dure la sensibilidad humana del ser.

Ahora bien, la capacidad heurística es un rasgo característico de los humanos que les acredita su racionalidad y está asociada a su aptitud para de la invención que a su vez le provee de alternativas para resolver problemas mediante la creatividad y el pensamiento lateral o pensamiento divergente. En la práctica orientadora es evidente la importancia del pensamiento heurístico, es decir asociado a la creatividad para orientar la toma de decisiones y para explicar, en un plano práctico, cómo las personas llegan a un juicio o solucionan sus problemas. Igualmente para reflexionar sobre su propia práctica y mejorarla o adaptarla a lo contemporáneo.

Esta es la importancia de la transdisciplinariedad, que a juicio de Nicolescu (2006) se inventó para superar jubilosamente las fronteras entre las disciplinas especialmente en la docencia y para redescubrir al sujeto por lo que los investigadores transdisciplinarios son considerados, por ese autor, como resurgidores de la esperanza. En el campo de la orientación se ha dado este paso que fortalece la práctica ante la versatilidad de sus funciones; así por ejemplo la neurociencia orienta la interpretación de la conducta como un hecho asociado a los procesos mentales que han sido muy valiosos para mejorar los procesos.

Conclusiones.

La orientación es una disciplina aplicada de las ciencias humanas, como disciplina, trabaja con los procesos inherentes al desarrollo del potencial de las personas con miras a fortalecer y hacer mas afectiva la evolución de tales procesos; obtiene y amplia sus conocimientos a través del estudio formal e investigación empírica sobre las personas y sus realidades interpersonales, sociohistóricas, y contextuales.

En la actualidad se mantienen los elementos que conllevan a definir la orientación como un proceso de acompañamiento para ayudar al desarrollo del ser humano en procurara de su bienestar integral.

El objeto de estudio de la orientación es el bienestar integral de las personas y por ende, de sus comunidades.

La función orientadora se ejerce lo largo del continuo de la vida, en el ambito personal, familiar, comunitario y socioproductivo.

La finalidad de la orientación es potenciar talentos, generar procesos de autodeterminación, libertad y emancipación en la construcción permanente del desarrollo.

La orientación centra su acción en la liberación de las capacidades emancipadoras de las personas en cuanto sus necesidades y sus requerimientos de desarrollo.

La orientación interviene en la formación activa de la persona para la autonomía, la responsabilidad, la independencia y la participación activa en la atención de sus asuntos personales y sociales desde su realidad particular.

Desde su origen, la acción de la orientación es educadora, independientemente del ámbito donde desarrolle sus actividades.

La prevención ha sido la vía determinante del éxito ante los riesgos que entorpecen el desarrollo de las personas; pero en muchas ocasiones es poco evidente, porque al partir de lo sano es sensible a ser juzgada como innecesaria; más, ante los hechos ocurridos por falta de prevención, es innegable su valor.

Es necesario que las y los orientadores se inserten en la comunidad escolar, laboral, vecinal, en las organizaciones; conozcan sus características, compartan sus sueños y, de manera técnica, pongan en práctica los conocimientos que la academia, la investigación y la experiencia le proporcionan para estimular el desarrollo necesario para el bienestar integral de las personas

Entre los elementos que guían el proceso de orientación está la capacidad para distinguir entre el acto y la potencia asociada con la actitud positiva y empática que conlleven a asumir que la persona es capaz de superar sus debilidades si recibe la orientación adecuada y pertinente.


…el hombre es un ser en un contexto humano,
vive en relación con otras personas
y esto constituye una característica inherente a su naturaleza
... principio del humanismo.








Referencias

Arthur: (1979), en De la Orientación al Asesoramiento Psicológico: Una
Selección de Lecturas. Caracas. Universidad Central de Venezuela Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico

Calonge, S (1988) Tendencias de la Orientación. Universidad Central de Venezuela. Caracas

Campos, D (2006): Tendencias Actuales de la Orientación en Venezuela. I Congreso Internacional D Investigación Y Postgrado. Universidad Nacional Experimental Politécnica De La Fuerza Armada Nacional. Caracas- Venezuela.

Campos, D y Campos, G: (2006) a: Armonía Biopsicosocial y Ergológica en el Ser. Seminario. Post Doctorado en Filosofía de la Ciencia. Universidad Rómulo Gallegos. San Juan Morros.

Campos, D y Campos, G: (2006) b: Filosofía de da Orientación en La Educación. Seminario. Post Doctorado en Filosofía de la Ciencia. Universidad Rómulo Gallegos. San Juan Morros.
Combs (s/f) en. Campos, D y Campos, G: (2006) b: Filosofía de da Orientación en La Educación. Seminario. Post Doctorado en Filosofía de la Ciencia. Universidad Rómulo Gallegos. San Juan Morros.


Coll, C (2001): Concepciones y Tendencias Actuales en psicología de la Educación. En Desarrollo Psicologico y Educación. Psicología de la Educación. Nro. 2 . Coll, C, Palacios, J y Marchesi, A. Compiladotes.
Alianza editores. Madrid.

Casado, E. (1987). De la Orientación al Asesoramiento Psicológico: Una
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Essenfeld, Z. (1979) en .De la Orientación al Asesoramiento Psicológico: Una
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Filloux, J: (2008) Epistemología, Ética y Ciencias de la Educación. Encuentro Grupo. Editor. Córdoba-Argentina.

Maldonado: (2007): La Metamorfosis de la Orientación. conferencia pronunciada en el I Encuentro Nacional de Orientación en Educación Superior. Caracas-Venezuela.

Moreno A y González, V (2008): La Orientación Como Problema. Centro de Investigaciones Populares. Colección Cionvivium Minor. Nro 4

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria. (2009). Proyecto: Sistema Nacional de Orientación. Mesa Técnica para el diseño de Sistema Nacional de Orientación. Caracas.

Tyler: (1979) en De la Orientación al Asesoramiento Psicológico: Una
Selección de Lecturas. Caracas. Universidad Central de Venezuela Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico

UNESCO (1998). Conferencia Mundial Sobre la Educación Superior en el Siglo XXI: Visión y Acción. La Educación Superior Para una Nueva Sociedad: la visión estudiantil (documento en línea). Disponible: http:// www.Educación.unesco/org/educprogg/wche/presentation.htm (consulta 1999, noviembre, 20)

Real Academia Española Diccionario De La Lengua Española - Vigésima segunda edición disponible en http://buscon.rae.es/draeI/

4 comentarios:

  1. Hola mi profe querida le escribe Glinis estudiante y fans de usted me parece maravilloso la pasión y amor que usted le a puesto a su trabajo desde todas las vertientes: conocimiento, musical y mas, recuerdo que juntos creamos un concepto en el aula móvil del Consejo 1era cohorte lo voy a buscar y se lo mando. Dios la siga bendiciones le he mandado por face una formaciones que estoy dando de CRP, de verdad son super, le voy a mandar una propuesta felicidades.

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  2. Muy buenas noches estimada colega, la felicito por tan buen material publicado. Saludos y mucho éxitos....

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  3. Excelente trabajo, deja muy bien explícito como adentrarse a la definición de orientación, funciones, énfasis en la acción del orientador, además dejando como reflexión y aprendizaje como en la praxis el orientador debe estar inmerso, así como también conocer la comunidad, en general el contexto donde desempeña su labor.

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  4. Excelente materia para consultar, de esta manera direccióna el conocimiento sobre este tema. Gracias

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